viernes, 11 de abril de 2014

SOLEDAD

SOLEDAD

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Hoy
me he sentido acompañado, pero aun no comprendo de quien, es como una compañera de aventuras, me ha estado siguiendo el día entero, ni respirar profundo me ha permitido, me acompana hasta en aquellos momentos en que mas la anhelo, aun no reconozco su figura, pero ahí esta pegadita a mi, como si fuera mi sombra, casi no le dirijo la palabra pero se que es capaz de escuchar mis pensamientos. Me quiero refugiar de ella pensando que en cuanto alguien llegue a casa podre ya no sentirla, pero vaya sorpresa que me llevo al darme cuenta de que por mas acompañada que este, ella sigue pegada a mi. Sigo sin hablar, ella sigue escuchando mis pensamientos, no tengo en que distraerme, voy a mi habitación y acomodo mis cajones, ella sigue aquí y no me ayuda.

      Termino los cajones y comienzo con el armario, saco toda la ropa, la miro, la descuelgo y la acomodo por color, no mejor por textura, no lo ideal seria por forma y tipo, la vuelvo a colgar y para mi desgracia termino muy, muy rápido, aunque ya no pienso en ella y ya no la siento, me doy la vuelta muy emocionado y me la topo de nuevo, ahí sentandita en la cama observandome y riendo un poco. Varias horas después, ahí sigue, incansable, incapaz de moverse, siempre quietecita pero muy atenta a mis actos, me observa, me acosa, me incomoda y cuando mas harto estoy de ella me susurra al oído que le gusta verme desprotegido y desamparado y que seguirá ahí hasta que yo logre acostumbrarme a su presencia, yo le sonrió desafiante y con un grito ahogado solo logro decirle que a mi no me vencerá, salgo corriendo asustado, sin mirar  atrás, cuando siento que ya llegue muy lejos gritando de alegría digo que me deshice de ella, solo logre escuchar su risa, ahí estaba algo agitada a mi lado. Ya por la noche, en la oscuridad de mi habitación ella se acomoda en el otro lado de la cama, se dispone a descansar de su agobiante acoso hacia mi persona, duermo resignado a su lado, deseando que por la mañana ya no este ahí.
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    Duermo incómodamente, con trabajos descanso, pienso mucho en mis seres queridos y en que no están ahí conmigo, pienso en ti y en tu amor pero no me sirven de mucho por que tampoco estas conmigo en ese instante, solo esta ella y ya estoy tan harto que no se que hacer. Por la mañana ella sigue ahí, no se movió ni un centímetro, me resigno y le hago la platica, ella se queda muda y estática, le insisto pero  lo mismo, decido mejor cambiarme y salir de casa, el día esta muy gris, al igual que mi humor, tomo una chaqueta, salgo a caminar por las calles y solo pienso en como deshacerme de ella, y si la estrangulo??, o mejor le doy un muy buen golpe?? o si me doy la vuelta y la abrazo y caminamos de la mano??, si le digo que todo estará bien??. Quiero llevarla de la mano a caminar, ella se niega, yo me enojo y vuelvo a anhelarla y cuando esto sucede me doy cuenta de quien es ella, de que su forma no la había distinguido por que la histeria me cegaba, la miro a los ojos y me doy cuenta de que ella a diario me acompana, vigila mis pasos y es mi mas fiel companera y así mismo la peor de mis enemigas, cierro los ojos, la abrazo y al oído le digo GRACIAS POR SIEMPRE ESTAR AHÍ, SOLEDAD… MI FIEL AMIGA.
 

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