EL AMOR FISICO

El amor físico es un saludo
que intercambian dos almas.

Espero haber hecho lo correcto,
Al permitirte alejarte de mí,
Porque sé que mereces vivir una vida feliz,
Aunque yo muera a cada instante,
Recordando tus besos y lo bella
que te veías al sonreír.

Hay que tener paciencia,
Esperando al ser amado, Porque al saber que está a tu lado,
Sabrás que valió la pena el haberlo esperado.

Quizás ya sepas
cuanto te amo,
Pero aún no sabes lo mucho que te extraño.

Aquel que no ha de perdonar,
No ha de conocer lo verdadero que es amar.


Heme aquí,
Pensando en ti,
Pidiendo por ti,
Orando por ti,
Y sabiendo que así no he de vivir.


Yo no soy el príncipe que tú esperabas,
Pues no llego a llenar ni la mitad de tu alma,
Y únicamente quiero que sepas,
Que te amé, te amo y te amare de ser posible hasta la eternidad.


Yo sé que Dios me mando a esta Tierra,
Con una única meta,
La cual es:
Hacerte feliz y de ser necesario,
Morir con tal de salvarte a ti...

Al ver en el espejo mi mirar,
Recuerdo aún tus ojos y como me hablabas sin una sola palabra,

Viendo el interior de mí boca recuerdo tu bella sonrisa,
Cantó y tus palabras zumban en mi mente,
Y me humillo al saber que estas a su lado,
Por qué sé que él nunca te dará la
riqueza de amar y ser amada.

No soy un poeta, ni soy un cantautor, ni hago piruetas, ni tengo una mansión y la única razón por la cual me inspiro es, recordar tus bellos ojos y el saber que tengo tu amor...

No hay palabra alguna la cual resuma,
Todo mi amor,
Mi felicidad y la forma en que me haces suspirar.

Precisamente en este momento que, en China está a punto de amanecer, mirando el cielo logro observar que, tus ojos me ven y me cuidan al caminar, y justo en ese instante logró recordar, que no sería lo mismo, sino tuviese tu querer y tu verdadero amar...

Mejor me ausentare por un tiempo,
Hasta que sienta que el viento,
Dejo de hablarme de ti,
Mejor ya no me pruebo a mí mismo,
Que hago más grande el abismo…

El verdadero paraíso no está en el cielo,
Sino en la boca de la mujer amada.

Porque no te bese en el alma cuando aún podía,
Porque no te abrasé la vida cuando la tenía,
Y yo que no me daba cuenta cuanto te dolía,
Y yo que no sabía el daño que me hacía…